Etxea
Folk
30/09/2008
Cd 1
Haurtxo Txikia - Estrella Morente
Bautista Bazterretxe - Lidia Pujol Y Olga Cerpa
Bazkaldurikan Bapo Bapo+Din Don - Ana Belén, Víctor Manuel, Olga Cerpa Y Emilio Aragón
Urzo Xuria - Teresa Salgueiro
Maitia Nun Zira - Ginesa Ortega
Joxe Migelen Batela - Joâo Afonso, Seydu, Vitorino, Leo Minax Y Tito Paris
Ikusten Duzu Goizean - Pedro Guerra
Hara Nun Diran - Mafalda Arnauth
Oriko Txoria+Prima Eijerra - Pau Donés Y Eliseo Parra, Amancio Prada, Olga Cerpa Y Filipa Pais
Oh Pello Pello - Andrés Calamaro, Jaime Urrutia Y Loquillo
Cd 2
Nere Sentimendua+Orain Kantatuko Dut+Madalenara - Santiago Auserón, Eliseo Parra, Carmen París, Xabier Díaz, Manuel Luna Y Guadi Galego
Maitia Nun Zira - Lluís Llach
Hiru Damatxo+Behin Batean Loiolan - Uxía, Marina Rossell Y Filipa Pais
Iruten Ari Nuzu - Miguel Bosé
Triste Bizi Naiz Eta+Xarmagarria Zira - Luis Pastor Y Lourdes Guerra, Vitorino Y Leo Minax
Miru Zuria+Ikusi Nuenean - Soledad Giménez Y Guadi Galego
Loriak Udan - Dulce Pontes
Lili Eder Bat Badut Nik - María Del Mar Bonet
Haika Mutil - Luis Eduardo Aute, Carlos Chaouen, Andrés Suárez, Antonio Orozco, Miguel Ríos Y Luis Ramiro
Bermeoko Portua - Joaquín Díaz, Seydu Y Joâo Afonso
Etxea (Casa en euskera) de Kepa Junkera, es un doble CD formato de lujo, que contiene canciones tradicionales vascas cantadas en euskera por un amplio elenco de artistas; desde Santiago Auserón a Calamaro, pasando por Estrella Morente, Lluis Llach, Loquillo, Pedro Guerra, Miguel Ríos, Jaime Urrutia, Ginesa Ortega, Ana Belén y Victor Manuel, Dulce Pontes, Miguel Bosé, Pau Donés o Luis Eduardo Aute. Hasta 42 cantantes y 15 músicos de la talla de Michel Camilo, Jose Antonio Ramos o Chano Dominguez dan forma a este disco que traspasa las fronteras del idioma.
Etxea con Kepa Junkera...
Por Román Urraza Williams
Creo que el más difícil todavía es posible, Kepa lo ha conseguido.Hablando con él pienso que no se da cuenta de la que ha liado… a veces lo imposible es natural para muchos y curiosamente ellos no se dan cuenta, no son conscientes.
Tras el viaje de vuelta a la tierra de mi familia, quedé con Kepa en dos espacios que para él son parte de su vida, los cuales han influido en su personalidad, como son: Bilbao y Busturia. Vamos a conversar durante un par de tardes en sus refugios, en los lugares donde se ha gestado el proyecto Etxea (casa en euskera). Bilbao nos impresiona con el cambio que ha efectuado, Busturia nos atrapa por su autenticidad, por su naturaleza... Nos adentramos por fin en el corazón de esta casa tan especial.
En Etxea vamos a oír 20 cortes pero 27 temas tradicionales. Kepa ha añadido pequeñas partes, pequeños trozos que siento que no quieren hacer ruido. "Todos los músicos han aportado sus arreglos, su visión de los temas que les presentaba" comenta feliz este músico bilbaíno. Se nota en el trabajo la libertad, las ganas, "el buen rollo" que existió durante las intensas grabaciones.
"En abril comenzamos en Bilbao con nuestro amigo José Antonio Ramos, para mí era sinónimo de buena suerte, era uno de mis mejores amigos, una persona super especial y por supuesto un grandísimo músico, su muerte ha supuesto una gran pérdida, pero en Etxea nos ha vuelto a regalar con su sensibilidad única. Le oiremos en temas muy sugerentes, junto a Teresa Salguiero (ExMadredeus) en "Urzo Xuria" o en "Iruten Ari Nuzu" junto a Miguel Bosé y en "Joxe Migelen Batela" junto a Calamaro, Joâo Afonso, Tito Paris, Vitorino, Leo Minax...con el que soñamos con las islas a las que tanto quería y que le inspiraron en sus proyectos".
Kepa nos va desgranando todo el proceso de la grabación, nos cuenta como empezó con una maqueta en la que grabó todo el material que había seleccionado durante muchísimo tiempo, como después siguió el trabajo de mandar a los invitados las propuestas, esperar pacientemente las respuestas y rápidamente ponerse manos a la obra, casi sin pensar en lo ambicioso del proyecto, "no sé si sabía muy bien donde me metía, pero me tiraba como una cuerda tensa, no podía evitarlo, tenía que enfrentarme al proyecto" nos dice el músico mientras nos regala un suspiro parecido al montañero que llega a la cima y respira hondo y satisfecho.
"La filosofía del proyecto nos llevó a viajar a las ciudades donde estaban los músicos y cantantes, fuimos a La Habana y grabamos con el pianista Roberto Fonseca, a Lisboa junto a Pedro Joia y Antonio Chainho, Madrid con Michel Camilo, Barcelona con el gran maestro Chano Domínguez, no sé, ha sido tan maravillosa la experiencia que se me pone la carne de gallina solo con recordarlo" Kepa sigue desgranando este viaje y nos damos cuenta de que nos hará falta tiempo y reposo para degustar la magnitud del trabajo y todas las historias que contiene, será una sobremesa de esas que todos soñamos alguna vez, una sobremesa llena de amigos y conversaciones, larga y sin prisas.
Comenzamos a comentar el trabajo con los cantantes y Kepa sólo tiene buenas palabras, multitud de anécdotas, risas y creo que recuerdos que contará a sus nietos sin lugar a dudas. "Les llamaba y lo primero era darme las gracias por invitarles, imagínate, yo pensando que me dirían es muy bonito pero no es el momento, resulta que para ellos era una prueba, un reto, una oportunidad para adentrarse en el mundo maravilloso de los idiomas, de las músicas que han pasado el filtro de las generaciones."
Son tantos los comentarios que nos harían falta muchas páginas para plasmar todo los que nos cuenta este rekaldetarra de pro. Quedémonos con que en este viaje musical , aquí están artistas de la talla de Dulce Pontes, Estrella Morente, Amancio Prada, Joaquín Diaz, Ana Belén, Víctor Manuel,
Aute, Loquillo...hasta 42 cantantes, no recuerdo un disco con este elenco, con esta auténtica selección de personas dispuestas a poner su granito para que este sueño adquiera forma de realidad.
Me gusta de Kepa la mezcla que ha efectuado, cantantes de todos los estilos, unos más mediáticos y otros a lo mejor desconocidos para la mayoría de la gente, pero todos ellos de una grandísima calidad. No era fácil la elección y pienso que Kepa demuestra una gran generosidad y un equilibrio digno de los grandes productores. "Para mí ha sido una de las experiencias mas importantes que he tenido, estoy súper contento por unir a diferentes generaciones de cantantes, de que unos hagan que se conozcan otros, creo que entre ellos mismos habrá descubrimientos" nos cuenta el músico mientras nos muestra diferentes fotografías del proyecto.
Tuve la suerte de que Kepa me enviara una maqueta de Etxea, así pude conocer los temas y leer sus textos y comentarios. Los temas son grandes, son emocionantes, tienen una fuerza y una sensibilidad que conmueve. No pienso que emocionará sólo a los vascos y a sus descendientes, creo que estamos ante un trabajo universal hecho por un hombre de este tiempo, abierto, moderno, viajero, con ganas de dar a conocer lo cercano y con una facilidad para conseguir que las cosas pequeñas puedan ser muy elegantes y sinceras. "Me gustaba la idea de dejar las canciones muy desnudas, que se oyeran las respiraciones de los músicos, el sonido de los instrumentos, sus entrañas, no hay claquetas, se escucha la libertad en todos los silencios" nos relata Kepa mientras acaricia una de las viejas trikitixas (acordeón diatónico) que tiene en su estudio del caserío Oliene en Busturia.
Sin lugar a equívocos nos encontramos ante una obra madura, asentada, extraordinaria, una de esas obras que muy de vez en cuando llegan a nuestras manos y oídos. Seguro que en muy poco tiempo adquirirá la vitola de clásica y pensaremos que se hizo años atrás. Una de esas obras que hace su labor poco a poco, sin darnos cuenta de lo que va a suponer para la cultura vasca, así como para la música y cultura del mundo.
Mi tiempo con este magnífico anfitrión se acaba, esta noche he quedado con unos amigos en Bilbao, no sé si me creerán cuando les cuente algunos de los detalles de Etxea, imagino sus caras de asombro e incredulidad mientras untamos la salsa de los chipirones que hemos encargado para cenar.
Antes de despedirme Kepa me enseña una hoja manuscrita, un pequeño texto de José Saramago:
"Hay un pueblo músico en donde está representados todos los pueblos del mundo como si fuera una casa común. El arquitecto y albañil de todo esto se llama Kepa"
Arquitecto y albañil, solo a una persona como al señor Saramago se le podría ocurrir, con una capacidad de síntesis extraordinaria, con esa facilidad para describir, como si fuera una antigua copla de trikitixa, mucho en muy poco.
Me encanta la definición, después de escuchar la maqueta y estar con Kepa estas dos tardes pienso que titularía mi texto así, y así lo haré, espero que no le importe al nobel portugués, hijo de la Ibería que tanto reclama. No hay mejor colofón para esta obra que el prólogo del gran escritor, de la gran persona siempre solidaria que ha intentando que la ceguera no se apodere de una parte del mundo como si fuera ese sol que ilumina una parte del globo y oscurece la otra.
Disfrutemos de ETXEA, algo que pienso hacer desde ya mismo, difundámoslo "boca a boca" como cuando siento que estoy ante algo que merece ser publicado y conocido.
Román Urraza Williams es periodista nacido en Boise, Idaho USA, con ascendencia procedente de Bizkaia. Critico especializado en música, actualmente escribe para varios diarios americanos y realiza colaboraciones para revistas de todo el mundo (Blackbook Magazine, Spin, Global Rhythm) interviene también en varios programas radiofónicos (NPR, World Music Central, PRI’s Rhe World) y efectúa masters por diferentes universidades de Norteamérica. Está considerado como uno de los gurus de las músicas del mundo.
Traducción del texto original en ingles: Bea Etxebeste.